Negar a las personas sus derechos humanos es cuestionar su propia humanidad.

Si hablas con un hombre en un idioma que comprenda, le va su cabeza. Si hablas con él en su propio idioma le va a su corazón.

Una buena cabeza y un buen corazón son siempre una combinación formidable.

Para ser libre no sólo hace falta deshacerse de las cadenas de uno, sino vivir de una manera que respeta y potencia la libertad de los demás.

Las personas valientes no temen el perdon, por el bien de la paz.

Debemos usar el tiempo sabiamente y para siempre darnos cuenta de que siempre es el momento propicio para hacer lo correcto.

La educación es el arma más poderosa que puedes usar para cambiar el mundo.

Si quieres hacer las paces con tu enemigo, tienes que trabajar con tu enemigo. Entonces se convierte en tu socio.

Siempre parece imposible hasta que está hecho.

Aprendí que el coraje no era la ausencia de miedo, sino el triunfo sobre él.

El hombre valiente no es el que no siente miedo, sino el que vence ese miedo.

En los países donde mueren personas inocentes, los líderes están siguiendo su sangre en lugar de su cerebro.

No se puede encontrar pasión en el juego pequeño - en conformarte con una vida que es menos de la que eres capaz de vivir.

Después de subir una gran colina, uno sólo encuentra que hay muchas más colinas que subir.